Arandina: 0  Algeciras: 0

Arandina: Álex, Plaza, Borja, Pajarero, Sergio, Obispo, Ruba, Adri (M-84, Gustavo), Zazu (M-63, Terleira), Álvarez, Berni (M-80, Mato).

Algeciras: Josemi, Maiquez, Merino, Benítez, Víctor, Manzano (M-64, Pavón), Melchor, Chico (M-86, Berlanga), Joselu (M-84, Gabri), Mario, Willy.

Incidencias:

Árbitro: Salguero Castillero, del Colegio Vasco. Mostró cartulina amarilla a Máiquez, por el Algeciras; y a Borja y a Obispo por la Arandina.

Goles: No hubo.

Público: En torno a 2.500 personas presenciaron el partido en El Montecilo.

Lo mejor: La imagen ofrecida por la Arandina, que mostró más ambición y por momentos puso en aprietos a un rival que, en ocasiones, exhibió cierta fragilidad. Superar la eliminatoria es posible.

Lo peor: El empate a cero obliga a ir a buscar el ascenso a un campo que podría congregar a más de 7.000 espectadores.

Empate sin goles en El Montecillo entre Arandina Club de Fútbol y Algeciras en un partido que deja patente el hecho de que el Algeciras es un equipo importante pero que la Arandina no es inferior.El hecho de no encajar ningún gol ante el conjunto gaditano añade más garantías a los ribereños porque de marcar en el partido de vuelta el ascenso se complicaría para los de andaluces.

Partido muy completo de los ribereños que comparecían en el partido de ida con las bajas de Toni Seoane e Isma Rangel, dos jugadores de gran influencia en el equipo en determinas fases del campeonato liguero. Acostumbrado como ha estado la escuadra ribereña a arrastrar un buen puñado de jugadores lesionados a lo largo de la actual campaña, los que salieron se mostraron especialmente competitivos.

De salida, el juego de la Arandina se vio condicionado por el viento que sopló en contra a lo largo de los primeros cuarenta y cinco minutos, una circunstancia que no frenó a los ribereños, que hicieron gala de una notable intensidad. Los de Bermúdez expusieron más que un rival por momentos a la expectativa que tampoco perdía el control del partido. Primera parte compleja para una Arandina condicionada por el viento en contra. El técnico vizcaíno de los locales presentaba un once inédito con los hermanos Terleira en el banquillo y con Zazu como falso nueve. Una fórmula que dio resultado a la hora de aportar más movilidad al juego de una Arandina que dominó en los primeros compases aunque con un único lanzamiento lejano de Borja Collado que se fue desviado.

En el minuto quince llegaba la ocasión más clara de la primera mitad. Javi Chico recibe en la frontal del área un balón de Joselu, que progresa desde la banda derecha, y Álex, con una gran intervención evita el primer gol visitante.

Los balones al área se convertían en el principal recurso visitante, que se sacudía el empuje local a medida que pasaban los minutos. Con el viento a favor, los de Algeciras lanzaron hasta cinco saques de esquina en los primeros cuarenta y cinco minutos por uno de la Arandina, con dificultades para sacar el balón jugado por las rachas de viento pero esforzada con un Berni especialmente entregado en la banda en tareas ofensivas y también en la recuperación del balón.Con empate a cero y relativa igualdad sobre el césped se llegó al descanso.

Segunda parte abierta. Frente a un equipo que no terminó de exhibir todo el potencial que se le presupone sobre el césped de El Montecillo, la Arandina salió decidida a marcar un gol que le diese cierta tranquilidad de cara al partido de vuelta.La conexión entre los ribereños Zazu y Ruba comenzó a dar sus frutos y el peligro de los locales llegó a balón parado, tanto con los ocho saques de esquina botados por la Arandina como por los balones enviados desde saque de banda por Obispo que dejaron entrever cierta fragilidad en el cuadro gaditano.

El cuadro visitante también dispuso de ocasiones para desnivelar la contienda. En el 58, Melchor recibe un envío desde la banda derecha pero su remate se encuentra con un Álex providencial que evita el gol de los de Algeciras. Instantes antes un remate de cabeza de Berni a un saque de esquina botado por David Álvarez a punto estuvo de suponer el uno a cero en el marcador. La segunda parte nos dejaba un choque más abierto a media que se acercaban los instantes finales, siempre con la incertidumbre del resultado. Collado en el 79 lo intentó desde fuera del área pero su disparo salió despejado a córner por un jugador del Algeciras.

El conjunto andaluz también llegó con peligro en los últimos minutos con un Máiquez que no acertó a rematar un centro desde la banda derecha y un remate de cabeza de Gabri que detuvo el meta Álex.90 minutos después, todo sigue igual salvó la certeza de que la eliminatoria se decidirá en un partido que la Arandina afronta con serias opciones de ascenso.

Javier Bermúdez | Entrenador de la Arandina

«El empate a cero es un arma de doble filo»

Javier Bermúdez hizo referencia al viento reinante en la tarde de ayer y que condicionó el juego de ambos equipos. «Por eso lo hemos planteado así, sin delanteros en el primer tiempo y con dos en el segundo tiempo. Sabíamos que el aire iba a influir mucho y sabíamos que en el primero teníamos que aguantar el aire. Ahí, hemos acertado».

El técnico de la Arandina destacó que «en las eliminatorias empatar a cero es un arma de doble filo porque si ellos meten, puedes meter un gol y estas obligado a meter un gol nada más.Ellos están obligados a hacer dos».

La Arandina con el viento a favor, dispuso de más ocasiones en la segunda parte. «Ha habido un rato que estaban asustados.También han hecho una ellos. Yo creo que es justo el resultado», afirmó Bermúdez quien no se mostró preocupado por el ambiente en el Nuevo Mirador porque «8.000 no juegan, juegan los de dentro».