Los vecinos de Busto de Bureba se despertaron ayer con la presencia de un fuerte dispositivo policial que buscaba pruebas para detener al atracador que a las 8 de la mañana había asaltado pistola en mano la oficina de CaixaBank, la única sucursal bancaria que existe enla localidad y de donde se llevó un botín cercano a los 40.000 euros. Según diversos testimonios, el delincuente iba encapuchado y estaba esperando a que el único empleado de la entidad bancaria abriera y, al parecer, le encañonó y le metió dentro de la oficina donde le maniató y consumó el robo.
Los nudos con los que amarró al empleado son supuestamente muy similares a los que usó un atracador a primeros de mes en una sucursal bancaria de Laredo (Cantabria). Del entorno de la investigación, ha trascendido que se cotejarán las imágenes de ambos atracos. El empleado de Busto no sufrió ningún tipo de lesión y en apenas unos minutos el atracador se dio a la fuga.
Se da la circunstancia de que la localidad de Busto de Bureba tiene numerosas salidas a distintas carreteras nacionales por lo que el dispositivo localizador puesto en marcha por la Guardia Civil tuvo que tener en cuenta todas las posibles vías de escape. Algunos vecinos del municipio burebano comentaron que en los últimos tres días se habían visto dos coches a primera hora de la mañana que no eran habituales del pueblo. Al parecer, ambos eran de color gris y al menos uno de ellos, era de marca alemana y gran cilindrada.
Mucha niebla
El ladrón actuó ayer con la impunidad que da un pequeño pueblo a primera hora de la mañana en este mes de noviembre. Además, la comarca burebana amaneció con una intensa niebla que mermaba bastante la visibilidad. Los vecinos de las viviendas próximas a la sucursal no oyeron nada raro a las 8 de la mañana y se empezaron a alertar después del robo, con la llegada de varias unidades de la Guardia Civil, la Policía Judicial, responsables de zona de CaixaBank y técnicos del sistema de videovigilalancia de la entidad bancaria. Todo este dispositivo estuvo hasta las once de la mañana haciendo su trabajo, tomando huellas y revisando las imágenes de las cámaras de seguridad. A media mañana, se acercó algún que otro cliente con intención de hacer una operación bancaria pero no pudo ser porque la oficina cerró sus puertas el resto de la mañana. El empleado atracado fue trasladado por compañeros suyos que trabajan en otras oficinas hasta el centro de salud de Briviesca donde se le hizo una exploración médica sin nada que reseñar. Algunos bustanos comentaron que el empleado de la entidad bancaria apenas llevaba un mes en ella y agregaron que en los últimos meses ha habido varios cambios de personal. La oficina bustana de CaixaBank abre cuatro días a la semana en horario de mañana. Tras el suceso, los vecinos más mayores se mostraron temerosos ante la posibilidad de que se repita un suceso similar y que puedan verse afectados directamente.
Similar también en Poza
El atraco de ayer recordaba bastante al que se produjo en otra localidad de la comarca, Poza de la Sal, en agosto de 2013. En ambos casos, el robo se produjo momentos antes de abrir la oficina, el autor fue una sola persona con pistola y las fechas fueron el día 19 de agosto y ésta vez el 20 de noviembre. También Poza de la Sal se caracteriza por tener numerosas vías de escape hacia carreteras que conducen a destinos muy distintos. La abundancia de vías de salida parece ser una de las características que buscan este tipo de atracadores en cualquier zona de la geografía nacional.