La hora de Podemos se acerca. No es el tic tac del que hablaba su secretario general, Pablo Iglesias, hace cuatro meses, pero sí se decide la suerte de muchos municipios y algunas regiones. Yes que 24 horas antes de verse con los cabezas de lista de su formación en 13 comunidades, el líder morado desveló pistas, al reconocer que es «evidente» que el PSOE está dando un «giro», y que la relación entre los socialistas y su partido «ha cambiado», como demuestra el «gesto» que tendió el número uno de Ferraz, Pedro Sánchez, al establecer contacto con él.

«Ahora me llama y antes no. Este tipo de gestos son reveladores de que la relación ha cambiado. Pensamos que esto es bueno y que nos sitúa en una posición de lograr cambios», valoró desde la sede de Podemos en la primera rueda de prensa que ha ofrecido tras las elecciones autonómicas y municipales del pasado domingo.

En este sentido, explicó que cree que es «un avance» en el sentido de «racionalizar» las relaciones políticas el simple hecho de que ya hayan hablado, si bien avisó de que de su primera conversación telefónica con el socialista no se pueden extraer «conclusiones precipitadas», y que hay que «seguir hablando», en relación a los acuerdos a los que PSOE y Podemos tendrán que llegar si quieren evitar Gobiernos del PP en muchas comunidades autónomas y municipios.

«Este tipo de conversaciones son siempre cordiales y con una voluntad constructiva. Hablamos de la necesidad de regeneración en este país y, específicamente, de lo que tiene que ver con el rescate ciudadano, pero es una conversación llena de ambigüedades y vaguedades de la que yo no querría extraer ninguna conclusión precipitada», ahondó el madrileño, que insistió en que han quedado en «seguir hablando», algo que harán la próxima semana, en su primera cita juntos, y a la que Podemos acudirá con la «mejor disposición y ánimo constructivo».

No obstante, quiso dejar claro que, a su juicio, es el PSOE el que ha cambiado, al haber dejado de decir «que no van a pactar con el populismo». «Parece, al menos por el tono, que se puede hablar de otras cosas de las que antes no se podía hablar», añadió.

Asimismo, Iglesias recordó que su grupo ha puesto sobre la mesa los dos ejes que condicionarán su apoyo a Ferraz y que son «tolerancia cero con la corrupción y medidas de rescate ciudadano»;lo que implicará «un giro de 180 grados» de los socialistas, con los que no entrará a formar parte de ningún Gobierno liderado por éstos, aunque sí puedan facilitar su constitución.

Desde Ferraz, el secretario de Organización del PSOE, César Luena, explicó que su partido respeta la decisión de Podemos de no entrar a formar parte de Ejecutivos capitaneados por su grupo y, al ser preguntado por si tienen el mismo planteamiento, apuntó que «es una opción».