«A nadie le hace gracia, pero queremos ser parte de la solución que busca el Estado». Así zanjó un circunspecto Salvador de Foronda, concejal de Hacienda, el debate sobre la subida de impuestos, tasas y precios públicos, la «mayor de la democracia en este Ayuntamiento», según el PSOE, que se aprobó ayer en una comisión de Hacienda ‘calentita’ con los únicos votos a favor del PP.
Los criterios, como reconoció el propio De Foronda, no pueden ser «más divergentes». Pero lo son.
El del PP, que es quien gobierna, es «alcanzar el 25% del grado de cobertura (relación entre costes e ingresos) de los servicios públicos municipales». Eso y algo que es obvio pero que el equipo de Gobierno no dijo así: cuando debes dinero y no es poco, para pagar tus deudas únicamente te queda ingresar más o gastar menos. Parece que en el Consistorio burgalés el catarro era gripe A, porque se quieren aplicar las dos recetas. Y la prueba es que, sin desglosarlo pero con firmeza, el titular de Hacienda aseguró ante los medios que a finales de este ejercicio el importe de los contratos que tiene suscritos el Ayuntamiento se habrá reducido en «seis millones de euros».
Lo que sí es seguro es que habrá más presión fiscal. Y también que la habrá antes de lo previsto porque algunos de esos precios públicos o tasas (los impuestos no porque ya están girados en su práctica totalidad) se incrementarán este mismo año tan pronto como se publique en Boletín su aprobación definitiva, algo que el PP pretende para el Pleno de este viernes.
De los 35 conceptos afectados por la revisión, 20 lo serán en el mismo momento en el que se publiquen las ordenanzas, lo que significa que sí, que habrá subida fiscal en el año en curso. Otros 15 quedan exentos, pero solo hasta 2013. En el cuadro que acompaña estas líneas pueden consultar qué es lo que sube y cuándo y cuánto, teniendo en cuenta que en algunos casos son subidas medias, como en el transporte urbano. El billete ordinario de autobús subirá un 5,26%, pero el ‘bonobus’ lo hará el 21,6%.
Quizás a modo de tabla de salvación, De Foronda recordó que las bonificaciones e incentivos fiscales a las empresas a través de exenciones parciales de impuestos, y que en algunos casos pueden sumar una parte importante de , por ejemplo, el IAE, se mantienen «para que las empresas sigan vivas y creen empleo».
«Abusivas e injustas». Aparte de lo que ya habían avanzado, en la oposición votaron en bloque contra la revisión fiscal y en el Pleno del viernes habrá más de lo mismo. La concejala socialista Carmen Hernando sí acentuó la crítica sobre aspectos concretos de la nueva tabla fiscal, a la que mostró su «contundente rechazo por ser abusivas, injustas y, en algunos casos como Asuntos Sociales, espectaculares». Hernando recordó que «muchos conceptos suben por encima del IPC» y que «es la tercera vez que el PP duplica la subida de impuestos después de ganar las elecciones para aflojar después».
Así, criticó que, al entrar en vigor 20 de los 35 conceptos nada más publicarse, «esta será la segunda subida fiscal en un mismo año», a lo que «se suma que al llevarlo en julio, el periodo de reclamaciones será en agosto, por lo que hemos pedido que, al menos, se extienda a la primera quincena de septiembre». Hernando también recordó que los ingresos ordinarios del Ayuntamiento «han subido todos los años», por lo que atribuye la revisión a la «intención de seguir gastando más».