Es probable que el 'síndrome telediario' afecte a más capitales de provincia, pero lo de Burgos con el noticiero nacional es una relación intermitente de la que rara vez salimos bien parados. Una de las últimas apariciones fue por triturar a 38 de los 62 aspirantes a bombero con una prueba eliminatoria de ortografía. Aquello llamó la atención por el resultado y por el hecho en sí, que invertía el orden y la forma de una oposición tradicional a un cuerpo de Bomberos.El pasado miércoles se publicó la convocatoria para cubrir 7 vacantes más en el parque de Burgos y el primer bloque de pruebas vuelve a incluir el test de conocimientos generales, por un lado, y el examen de conocimiento de la ciudad, resolución de problemas, cultura general y «el correcto uso ortográfico/gramatical» (sic).