Hoy se ha disputado la Milán-San Remo, cita marcada en el calendario de los clasicómanos y por supuesto en el de Carlos Barbero. El burgalés es un apasionado de las clásicas y hoy ha realizado un papel muy digno en una prueba cargada de corredores de primer nivel pero le faltó la fortuna en un momento determinado de la carrera. En la bajada de la Cipressa, el sprinter alemán André Greipel se cayó justo delante de Barbero y el corredor del Movistar no pudo esquivarle, lo que le hizo perder comba con el pelotón principal. Finalmente, entró en la línea de llegada en la posición número 57, a poco más de un minuto del ganador, el italiano del Bahrein-Mérida Vincenzo Nibali.