La decisión de la Consejería de Educación de exigir una matrícula mínima de diez alumnos en primer curso pone en peligro ocho ciclos formativos y programas de cualificación profesional inicial (PCPI) que se ofertan en Burgos.
Si entre las convocatorias de junio y septiembre no logran reunir ese número quedarán congelados el próximo curso 2012-2013, aunque se garantiza que los alumnos que han iniciado estos estudios puedan concluirlos. De este modo, los alumnos formalizarán una «matrícula condicionada» a que se alcance la cifra de diez.
De los ocho ciclos formativos, hay tres se encuentran en peor situación porque llevan varios años arrastrando un baja demanda y están ubicados en la provincia. Por ejemplo, Gestión Administrativa (grado medio) que se oferta en el instituto Valle del Arlanza de Lerma, que algunos cursos ha tenido solo dos alumnos y otros muchos no ha superado los seis.
Además, está en la cuerda floja el ciclo de grado medio de Instalaciones Eléctricas y Automáticas que se oferta en el IESMerindades de Castilla, que este curso solo cuenta con 6 alumnos en primero. Tampoco las tiene todas consigo el ciclo superior de Administración y Finanzas de este mismo centro, que tiene 11, informa Ana Castellanos.
El ciclo de Gestión Administrativa del IESLa Bureba de Briviesca tiene también la espada de Damocles encima por rozar los 10.
El resto de ‘congelaciones’ afectaría a programas de cualificación profesional inicial, algunos de ellos en Aranda de Duero.
La capital, sin problemas
Por lo que se refiere a la capital, la mayoría de los ciclos superan los 20 alumnos. El único que ha tenido menor matrícula estos últimos años ha sido el de Acabados de la Construcción del IES Enrique Flórez, pero este curso ha remontado al llegar a 15.
La oferta de los tres centros específicos de FP, Simón de Colonia, Juan de Colonia y Escuela de Hostelería, goza de muy buena salud, así como la de los IESDiego Porcelos y Diego Marín Aguilera.
Parecida situación se vive en la Escuela de Arte, aunque su ciclo de Esmalte Artístico sobre Metales al Fuego es el que menos matrícula tiene. Desde este centro se ha reclamado en numerosas ocasiones una modificación de su oferta para adaptarla a las nuevas demandas del mercado (piden Fotografía y Diseño Gráfico).
El director provincial de Educación, Juan Carlos Rodríguez Santillana, mantuvo hace unos días una reunión con los directores de los centros que imparten Formación Profesional para explicarles la situación, así como la posibilidad de aumentar la ratio de alumnos por clase hasta llegar a los 30, lo que podría afectar a la calidad al tratarse de unos estudios muy prácticos.
Este curso 2011-2012 han elegido cursar estas enseñanzas 5.282 estudiantes, lo que supone casi un centenar más que el pasado. De ellos, 2.803 están en ciclos de grado medio (1.362 están matriculados en centros públicos y 1.441 en concertados) y 2.479 en grado superior (1.515 en centros públicos y 964 en concertados).
El grueso del alumnado corresponde a la capital con 3.846 matrículas (2.019 en grado medio y 1.827 en grado superior). En Aranda hay matriculados 623 (325 en grado medio y 298 en grado superior y en Miranda 612 (300 en grado medio y el 312 en superior).
A estos datos hay que sumarlos de programas de cualificación profesional inicial (PCPI) destinados a alumnos de 16 a 21 años que no han obtenido el título de Graduado en Secundaria. Su objetivo es que logre unas competencias básicas para poder trabajar. Tienen una duración de dos años: el primero es práctico y el segundo posibilita la obtención del título de Secundaria si se aprueban todos los módulos y su realización es opcional. Este curso cuentan con un total de 469 estudiantes matriculados.
La crisis económica y las buenas salidas laborales que ofrecen han sido determinantes para la consolidación de estos estudios en los últimos años.