30 muertos tras un atentado en una mezquita de Afganistán

SPC
-

La Policía desvela que el ataque fue perpetrado por dos insurgentes disfrazados de mujer y ataviados con burkas y sospecha que podría tratarse de una nueva acción del Estado Islámico

La jornada de ayer en Afganistán estuvo marcada por las luces y las sombras. Poco después de conocerse que un comando afgano conseguía liberar a los 61 prisioneros de una cárcel talibán en la provincia de Helmand, un nuevo atentado suicida volvió a ensombrecer el país, dejando al menos 30 víctimas y cerca de un centenar de personas heridas tras un ataque perpetrado contra una mezquita de la minoría chií en al ciudad de Gardiz, en la provincia de Paktia, al este del país. 

El atentado ocurrió a las 13,30 hora local, cuando una pareja de insurgentes disfrazados con burkas de mujer detonaron los explosivos que portaban encima en una mezquita de la minoría religiosa durante la hora del rezo en la ciudad de Gardiz, capital de Paktia. «Dos terroristas suicidas participaron en el ataque. Los asaltantes, que vestían burkas de mujer, abrieron fuego contra los guardias de la mezquita, en primer lugar, y tras matarles entraron e hicieron detonar sus explosivos entre los creyentes», explicó el portavoz de la Policía provincial, Sardar Wali Tabasum.

El gobernador adjunto de la provincia, Abdul Wali Sahi, detalló por su parte que «hasta ahora 30 participantes en el rezo han muerto y más de 50 han resultado heridos». Asimismo, añadió que «estamos trabajando para tener todos los detalles sobre las víctimas, porque los heridos y cadáveres han sido llevados a varios hospitales», aclaró Sahi.