La directiva del Burgos ofrecerá la renovación a David González como secretario técnico del club y la próxima semana, miércoles o jueves, se celebrará una reunión para intentar cerrar el acuerdo. A partir de ahí, cuando se concrete su continuidad comenzará el trabajo de planificación de la próxima temporada, empezando por el nombre del técnico y a continuación las posibles renovaciones de la actual plantilla.

Los miembros de la junta directiva ya lo tenían claro hace varias semanas. Incluso el presidente, Juan Carlos Barriocanal, le había comentado a David González que antes de acabar el mes de abril  hablarían de su situación. Pero el paso definitivo se dio el lunes por la noche, en la reunión de la junta directiva. Este fue uno de los puntos importantes de la convocatoria y se acordó organizar una reunión para la próxima semana y comenzar unas negociaciones que en principio no presentarán demasiados problemas.

Si se llega a un acuerdo, David González iniciará la planificación de la próxima campaña y una de las primeras decisiones gira en torno al nombre del entrenador, con dos opciones: la continuidad de Ramón María Calderé o la contratación de un nuevo técnico.

Rumores sobre Calderé

Directivos y el propio David González no hablan de este tema y prefieren esperar, aunque todo parece indicar que el técnico catalán no seguirá en el club pese a que en sus dos temporadas al frente del equipo ha cumplido con los objetivos marcados desde la directiva, es decir, el ascenso y asentarse en Segunda B.

Lo que sí han surgido son los primeros rumores sobre el destino de Calderé, que lo sitúan en el CD Castellón, un histórico club que ahora mismo está en Tercera División y que intenta salvar la categoría. El CD Castellón sufre una situación económica muy delicada y su objetivo, además de eludir el descenso a Preferente, es hacer un proyecto para intentar el ascenso a Segunda División B la próxima temporada. Es aquí donde encajaría Calderé, que tendría allí la misma misión que ya ejerció, con éxito, la pasada temporada, es decir, conseguir el ascenso.

También se ha dicho que Calderé quiere regresar a su tierra y seguir en tierras catalanas su labor como entrenador.