Detienen a 6 rumanos por 2 robos violentos en Mamolar y Contreras

Belén Antón / Salas
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Los asaltos ocurrieron el martes y el miércoles y en ambos casos los ladrones entraron en las viviendas de dos septuagenarios y sustrajeron dinero y objetos tras amenazarles de muerte

El primer asalto les salió bien; el segundo no tanto porque en su huida se toparon con el dispositivo especial montado por la Guardia Civil para darles ‘caza’. Seis individuos de origen rumano, tres hombres y tres mujeres, fueron detenidos en la madrugada del jueves como presuntos autores de dos robos con violencia perpetrados el martes a mediodía y el miércoles por la noche en sendas viviendas de Mamolar y Contreras, en la comarca de Salas de los Infantes.

La detención se produjo cerca de Aranda de Duero gracias a los controles de carreteras, después de que la víctima del robo del miércoles por la noche diera aviso de la dirección que habían tomado los ladrones tras abandonar su casa. Algunos de los detenidos, que han pasado esta mañana a disposición judicial, han sido identificados a través de fotografías como autores de los hechos por las dos víctimas, ya que o bien reconocieron sus caras o las ropas que llevaban puestas en ese momento.

Los arrestados son E.V.B (35 años), I.B. (24), L.S. (37), I.D. (23), V.P.A. (43) y P.T.L. (35) y se les imputan los presuntos delitos, en distinto grado de autoría, de detención ilegal, robo con intimidación y adicionalmente una falta de lesiones. Las diligencias instruidas han sido presentadas en el Juzgado de Instrucción de Salas de los Infantes. La investigación sigue abierta y la Guardia Civil no descarta nuevas detenciones.

El primero de los robos se produjo el martes, en torno a las 15 horas en Mamolar, cuando la víctima entró en su domicilio tras salir del bar con otros vecinos, a solo unos metros de su casa. Entonces dos hombres con guantes le siguieron dentro, cogieron un cuchillo de su cocina y comenzaron a amenazarle colocándoselo en el cuello mientras le pedían dinero. Una vez que les dio el dinero, bajaron el arma blanca. «Después me pidieron oro y la caja fuerte», relata la víctima, que pronto identificó que eran personas extranjeras y que relata que finalmente se llevaron unos 400 euros, su teléfono móvil y dos tarjetas bancarias que ya ha anulado. «Les di las claves verdaderas, porque me amenazaron de muerte si eran falsas».

Después de recorrer toda la casa, los dos hombres abandonaron el domicilio con tranquilidad, pero amenazando a la víctima con que en dos horas no avisara a nadie. «Me dijeron que si decía algo volverían otros dos hombres y me matarían. Cerraron la puerta con las llaves por fuera y las dejaron sobre la ventana, por lo que después pude cogerlas y abrir», explica el hombre, que puso los hechos en conocimiento de la Guardia Civil de Huerta de Rey. Los delincuentes huyeron en coche por la carretera que une Mamolar con Pinilla de los Barruecos. Un sobrino de la víctima vio que una mujer rubia conducía un coche a gran velocidad en esa dirección.

Vigilado

Lejos de tener suficiente, los ahora detenidos volvieron a actuar un día después en Contreras. En este caso la víctima se encontraba en el interior de su vivienda, durmiendo. «Me acosté sobre las once menos veinte y a las once y media me desperté por una luz del móvil y encendí la lámpara de la mesilla. Vi a dos hombres junto a mi cama que me decían que les diera el dinero o me mataban y me preguntaban por el oro. Me dieron un golpe en la cara y una patada», cuenta el jubilado, que confiesa que entraron por las ventanas de su casa. «Antes de acostarme vi un coche que venía por el camino de Silos y que iluminaba mi casa. Ahora pienso que es porque estaban esperando a que me quedara dormido para entrar».

Tras golpearle, los dos hombres que en este caso iban con pasamontañas, bufandas y guantes, le agarraron bruscamente del cuello de la camisa y lo llevaron por las distintas dependencias de la casa. «Registraron todo y se llevaron lo que quisieron, dinero, relojes, unas llaves…», recuerda el hombre, al que los ladrones dejaron atado a la cama antes de marcharse. «Cuando oí que se habían ido me desaté y llamé a la Guardia Civil. Les avisé de que se habían marchado por el camino que va hacia Silos y les indiqué por donde podían cogerles», explica la víctima. Al poco, miembros de la Guardia Civil se personaron en su domicilio y después le comunicaron que los ladrones habían sido detenidos con el botín.

El hombre de Contreras identificó a los asaltantes por la voz y por la ropa. «Les conocía de antes, uno de ellos ha estado trabajando en un pueblo cerca de aquí y al otro ya le había visto antes. Igual que a las mujeres, les había visto con ellos hace un tiempo en Quemada, un pueblo próximo a Aranda». Y es que es precisamente la zona de la Ribera donde parece tener su centro de operaciones la banda ahora detenida, en la que unos entran en las casas y otros esperan en los coches para huir.

En ambos sucesos el perfil de la víctima es el mismo, hombres, de alrededor de setenta años, que viven solos. Lo que es diferente es la hora del delito, uno a plena luz del día y otro ya entrada la noche. «Nos sentimos muy indefensos en los pueblos. La misma semana, los mismos ladrones han robado en dos sitios distintos», comenta una de las víctimas.