La Guardia Civil mantiene abierta aún una investigación por tráfico de estupefacientes que abrió hace semanas y que llegó a su punto álgido a finales del mes pasado, cuando el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA)  abortó un intercambio de hachís por dinero en el centro comercial Hipercor.

Los investigadores de la Benemérita llevaban meses siguiendo la pista a unos presuntos traficantes que operaban en Burgos capital y en la comarca de la Bureba. Practicaron numerosas escuchas y en las conversaciones descubrieron que en la última semana de marzo se preparaba una entrega de droga en la capital. La Unidad  Orgánica de la Policía Judicial desplegó un gran dispositivo para detener tanto a la persona que traía la droga como a los presuntos compradores.

La reunión iba a tener lugar en el aparcamiento de Hipercor y allí establecieron el operativo, con numerosos agentes vestidos de paisano. En cuanto observaron que los dos individuos a quienes seguían el rastro se encontraban en el parking decidieron actuar.

Los guardias civiles detuvieron a los dos individuos y les cachearon. Después procedieron a registrar el vehículo propiedad del correo, en el que fueron hallados siete kilos de hachís. El hombre que traía la droga es español, andaluz para más señas, y viajó a la capital burgalesa desde Málaga. El otro individuo es de nacionalidad marroquí y tiene domicilio en Burgos.

Una vez abortada la supuesta entrega de droga, la Guardia Civil desarrolló la segunda fase de la operación. Tras solicitar una autorización al juzgado de instrucción llevó a cabo registros en una vivienda de la capital y en otras dos de Briviesca. Acompañados por la Unidad Canina, revisaron todas estas casas y en una de ellas encontraron un paquete con algo menos de medio kilo de la misma sustancia. Tras ello, fueron detenidas otras dos personas, dos varones también marroquíes y una ciudadana española.

Los cinco arrestados pasaron a disposición judicial hace justo quince días -todavía hay secreto de sumario sobre la causa- y cuatro de ellos ingresaron en prisión provisional, mientras que uno -la mujer- quedó en libertad bajo fianza.

El EDOA de la Guardia Civil no ha dado aún por cerrada la operación, de hecho sigue practicando diligencias sobre el caso y no se descarta que se produzcan más arrestos y entradas y registros a domicilios.

Se calcula que la droga decomisada al presunto traficante procedente de Andalucía podría costar en el mercado ilegal cerca de 60.000 euros. El juez habrá de determinar si el resto de los arrestados eran los destinatarios del paquete, para lo cual serán fundamentales las grabaciones de las conversaciones telefónicas que efectuaron los investigadores.

Más incautaciones

En lo que va de año la Guardia Civil ha asestado golpes importantes al tráfico de hachís. En total ha decomisado a lo largo de 2014 más de 1.500 kilos de esta sustancia estupefaciente. Las incautaciones más importantes tuvieron lugar en el corredor de Madrid al País Vasco. A finales de febrero hallaron 800 kilos de esa droga en una furgoneta cerca de Lerma (el conductor pudo darse a al fuga). A finales de enero aprehendió 641 en un doble fondo de un camión que circulaba por la AP-1.