La consejera Pilar del Olmo ha recordado que la concesión que acaba de terminar tenía una vigencia de 50 años y, a preguntas sobre si no se podría haber evitado que caducase la licencia, ha descartado imprevisión, si bien ha recordado que el Gobierno de la nación ha estado en funciones casi un año. "No es tan sencillo porque es un expediente administrativo complicado", ha sentenciado al respecto.