La infamia que no cesa

Á.M.
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Mari Paz Fernández, viuda del comandante Ripollés, víctima del Yak 42: «¿Cómo es que condenan a cárcel por corrupción y nadie es responsable cuando se mata a personas?»

José Manuel Ripollés era conocido en las misiones del Ejército español como 'El Conseguidor'. Comandante de Ingenieros, tipo lúcido y afable, era uno de los oficiales destacados en la misión de paz que España envió a Afganistán o a  Kirguistán a comienzos de 2003. En total, 62 hombres que el 26 de mayo de aquel año regresaban a casa en «un vuelo pirata», tal y como escribió el propio Ripollés a su familia unos días antes de subirse a un Yakovlev 42 de UM Airlines. 20 de esos hombres tenían base en Burgos. Murieron todos (además de 12 tripulantes) en las inmediaciones del aeropuerto de Trebisonda (Turquía). El siniestro de su avión fue la mayor catástrofe militar española en tiempos de paz, que se vio agravada por la revelación de toda suerte de irregularidades, negligencias y despropósitos tanto en la contratación del vuelo como en la posterior gestión del siniestro.

Cadáveres mal identificados, mentiras, investigaciones viciadas y una de las batallas judiciales más largas de lo que va de siglo fueron otras consecuencias de la tragedia. Los familiares de los caídos han batallado contra todo lo que pasó entonces y contra todo lo que vino después. Aseguran que no les sorprende que ahora se demuestre que, fruto de la premura en enterrar, literalmente, el suceso, hayan aparecido en Turquía restos de los caídos enterrados allí con perfecto conocimiento de, como mínimo, el segundo gobierno de José María Aznar. «Venían sanos y salvos de una guerra y los mató su propio país», llora Mari Paz Fernández, viuda de Ripollés. Ella y sus hijos se quedaron en Burgos porque «te puedes ir, pero el dolor te lo llevas a todas partes». Esta es una de las 62 historias de dolor que se escribió en aquella maldita colina turca.

 

15 años y no hay manera de cicatrizar el caso...

No, no la hay. Y no la hay porque han dado todo a cuentagotas, de forma bastante calculada para sus intereses. Ha habido procesos tanto judiciales como civiles que tienen estipulados unos plazos de prescripción y, en base a eso, yo creo que se nos ha dosificado tanto el dolor como la resolución de estos asuntos, que encima no se han resuelto. Si se sabe desde el primer momento que existe una responsabilidad subsidiaria del Estado, por qué no se dijo desde el primer momento. Intentan cansarnos, agotarnos. 

¿Sirve de algo el perdón que pidió la por entonces ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, el año pasado?

No sirve de nada. Llegó tarde. En una sociedad democrática que envía a la cárcel a gente que comete delitos de corrupción, cómo es que nadie es responsable cuando se mata a personas, a funcionarios que pusieron sus vidas en las manos del Estado. Mi marido tenía una carrera prometedora; era joven y había mantenido importantes colaboraciones. Sin embargo, el perfil de cada uno de los fallecidos no se ha valorado individualmente. 

El accidente les quitó todo lo que tenían y todo lo que podrían haber tenido...

Exacto. De hecho, existen leyes que señalan la necesidad de contemplar la proyección profesional de las personas para establecer la responsabilidad patrimonial. Lo han hecho mal desde todo punto de vista, no sólo el político. Si hemos podido llegar a esclarecer algo ha sido porque hemos contratado a nuestros propios abogados e investigadores. Recuerdo que cuando se hicieron las identificaciones, si no llegamos a contactar nosotros con gente especializada, lo tapan todo. Y de aquellas aguas estos lodos.

¿Esperaban una noticia como la del hallazgo de restos en Turquía 15 años después?

Nos lo esperábamos porque se sabía. Lo hicieron todo deprisa. En un día no se pueden recoger los restos de un accidente aéreo. No nos ha sorprendido en absoluto. Es más, ya nos han reconocido que no se trata de una pierna, como dijeron al principio; hay al menos 23 restos de nuestros héroes allí enterrados.

Hay un agravante más: parece que los fallecidos en el accidente del Yak 42 no han obtenido el reconocimiento heroico que sí se da a otros militares caídos en acto de guerra.

Efectivamente. Aunque parezca crematístico, algo de esta magnitud no se puede contemplar como una muerte puntual. Esto debió equipararse a un acto terrorista, porque lo que ocurrió fue terrorismo de estado. El Estado se ha quedado con los complementos que cobraban las víctimas en vez de pagárselos a sus familiares. Hemos gastado en abogados una media de 50.000 euros cada familia... Todo esto debieron haberlo pagado. Dolores de Cospedal nos refutó esto diciendo que el Estado ya había pagado, pero el Estado no ha pagado nada porque lo único que se ha obtenido aquí ha sido del seguro de los aviones. Por cierto, el avión no tenía seguro y tuvieron que adelantarlo. Igual que no funcionaba la caja negra, igual que no tenía plan de vuelo... ¿Por qué tengo que luchar yo contra unas compañías que han contratado ellos? Lo que hemos recibido ha sido de los juicios contra las compañías, y para eso hemos tenido que buscar a nuestros abogados. Cuando tuvimos la primera reunión aquí, en el Diego Porcelos, los enviados de Madrid dijeron que nos buscáramos abogados si queríamos sacar algo de las compañías. Yo les dije que mi marido no había contratado el viaje en una agencia; ellos le metieron ahí.

Decía que no se les ha dado la condición de héroes caídos en misión de paz...

Sí, es perverso lo que se ha vivido en el Día de las Fuerzas Armadas. Es una aberración. Sólo el hecho de que se celebre el Día en la misma fecha de su muerte me parece mal, pero ya que lo hacen, lo mínimo sería homenajearlos, nombrarlos, tratarles como a héroes. No solamente no lo hacen, sino que en el acto de los caídos ni se les mencionó. Se aprovechó un evento de estas características para hacer política. En la carpa junto a las autoridades, Dolores de Cospedal estuvo hablando con los periodistas  de comisiones de investigación, pero ni una palabra para nuestros soldados.

Por contra, en el estamento militar sí hay una clara empatía hacia sus compañeros caídos.

Por supuesto, pero los altos cargos son cautivos de la política. Cuando se condenó a estos militares cautivos que tuvieron que hacer cosas contra su conciencia para recogieron los restos, estos fueron juzgados y resultó que se usó dinero de la ‘caja b’ porque este señor (Federico Trillo) tuvo que sacarlos de la cárcel. Él era el responsable. 

¿Qué dicen los militares que sí se atreven a hablar con ustedes?

Lo que estamos hablando, sin lugar a dudas. Sospechamos que hay cosas muy gordas detrás de este accidente y de las contrataciones de los vuelos. Nadie está removiendo esto, tampoco los partidos políticos. Hubo muchos esfuerzos por tapar todo, por ocultar lo que había detrás. Creo que había gente muy bien posicionada que estaba metida en esto. Y, aunque fuera así, el responsable político directo de todo esto tenía que haber caído.

Pues le hicieron embajador en Londres.

Claro, encima un premio. Eso duele mucho.

¿Qué dicen los hijos de los caídos en el accidente?

Algunos hijos están muy mal. Niños que tenían 13 años y ahora tienen 28 ó 29 y a los que han destrozado la vida porque llevan con tratamientos psicológico desde entonces. Tienen trastornos de ansiedad, estrés postraumático... Patologías que no les permiten llevar su vida normal. ¿Quién paga eso? Necesitan médicos especializados que nadie nos da, lo tenemos que pagar de nuestro bolsillo. Se ha causado un daño moral y psicológico continuado a lo largo de 15 años.

¿Cree que conseguirán algo al final de todo esto?

Después de los últimos acontecimientos, estamos detrás de pedir a los partidos políticos que se unan para que haya una comisión de investigación. Sabemos que se ha elegido oportunamente el momento de hacer público todo esto (la ‘aparición’ de restos de las víctimas en Turquía) porque todos están mirando a la moción de censura, para taparlo. Lo sabían hace mucho tiempo, pero también esperaron a que pasara el Día de las Fuerzas Armadas. 

¿Qué tal se han portado los turcos?

Los turcos han sido los que mejor se han portado siempre, han sido impecables en todo. Los pocos que estaban bien identificados en las autopsias fueron personas identificadas por ellos; entre otros, mi marido. Lo que hicieron los españoles fue la debacle, todo prisas y repartiendo los restos de nuestros héroes de aquella manera. Lo que quedaba por allí, como había mucha prisa, se dejó. En un accidente aéreo tardan meses en investigar la zona, y esto lo quisieron hacer en dos días.

¿Cree que el resto de partidos políticos va a tener interés en recuperar la causa?

Creo que es un deber democrático que esto sea así. Aprovecho para recordar que debe ser propuesto por un partido político, esperamos que al menos uno dé el paso adelante y los demás se adhieran.

También hay familias de los caídos que quieren acabar con esto, seguir con sus vidas y pasar página.

El dolor es libre. Si somos tres como si somos 20. Hay que atender a las personas de forma individual, las sensibilidades son individuales. 

Antes ha hablado de «terrorismo de Estado». Es algo muy duro.

Yo estoy convencida. ¿Por qué razón se han hecho comisiones de investigación del Alvia, del metro de Valencia etcétera, y con esto no hay manera? Qué casualidad, los primeros y somos los únicos que no tenemos comisión de investigación. Es la mayor tragedia militar en tiempos de paz, mató a gente muy preparada y comprometida, gente altruista, gente que no merecía esto. Este caso te da la categoría de un país.