El rector, Manuel Pérez Mateos, explica que el terreno afectado está catalogado como zona verde, por lo que es necesaria una modificación puntual del PGOU. Propone permutarlo por una parcela universitaria al otro lado del inmueble histórico. Asegura que cuenta con el apoyo de todos los grupos políticos. De esta forma, se podrían compatilizar los usos académicos y culturales y cerrar un acuerdo con el Ministerio, que espera que se materialice en febrero.