Un error humano causó la falta de luz en la marcha del 17N

A. del Campo
-

El escrito presentado por los convocantes no fue comunicado a Alcaldía. Los colectivos vecinales no dudan de que de haber tenido constancia, Raquel González habría autorizado el suministro

Fue uno de los momentos más tensos durante la manifestación celebrada en Aranda el pasado sábado por una sanidad de calidad. Cuando más de 7.000 personas estaban en la plaza Mayor escuchando el manifiesto final de la marcha, uno de los portavoces vecinales, José María Rojas, afirmó que el Ayuntamiento no había querido suministrar electricidad a la megafonía. En ese momento la multitud empezó a abuchear a la alcaldesa que, sin pensar en qué le beneficiaba más, subió directa al escenario para afirmar que ella no tenía constancia de ninguna petición de luz. Pero le fue imposible explicar nada más debido a la pitada general. Fue un momento tenso que casi enturbia lo realmente importante: la demanda de especialistas médicos.

Tres días después de aquel altercado, tanto las asociaciones vecinales convocantes de la manifestación como el Ayuntamiento de Aranda han cerrado todas la polémicas. Ambas organizaciones han emitido un comunicado conjunto en el que aclaran que «no hubo denegación alguna por parte del Ayuntamiento a la solicitud cursada y sólo se debió a un error humano en el departamento de electricidad». «Queremos igualmente aclarar que el Ayuntamiento y todos los partidos que lo conforman y las asociaciones vecinales venimos colaborando en cuantas manifestaciones en reivindicación de la sanidad se han realizado», señala el comunicado firmado por la alcaldesa y las asociaciones vecinales.

«Me ha llamado a primera hora de hoy (por ayer) la técnico y nos ha pedido disculpas porque es verdad que ese escrito lo habíamos presentado, fui yo misma, el 31 de octubre. Y claro, ella ha dicho que estaba en su mesa debajo de un montón de papeles. Ella pedía disculpas. Que de verdad no sabe cómo le había pasado. Que es verdad que la alcaldesa no sabía nada, de eso no tenemos ninguna duda», declara una de las representantes de las asociaciones vecinales, Pilar Juez. Ella incide en que ninguna de las dos partes «actuó con mala intención». Ni el Ayuntamiento quiso boicotear la protestas ni José quiso crear esa polémica, subraya la representante vecinal. Los convocantes de la manifestación resaltan que ellos quieren un sentimiento de unidad y no generar polémicas.

Lo que sí puntualiza Pilar Juez es que «se tenga en cuenta este error para que no se repita». «Esto que ha pasado con nuestro caso puede ocurrir con algo que repercuta al ayuntamiento y puede suceder como en casos que estamos pagando por no haber atendido a tiempo cualquier sugerencia o denuncia», añade. Por su parte, la alcaldesa, Raquel González, afirma que «este problema no tiene nada que ver con otros que requieren un informe. Este es el único caso que ha pasado de una cosa de estas». 

La regidora explica que este episodio se podría haber «solucionado dos minutos antes» si se lo hubieran comunicado. Entonces habría llamado al electricista de guardia y este «actuaría inmediatamente, como en la noche de Ronda». También señala que el nuevo expediente electrónico ayudará en estos casos al permitir ver «quién es el técnico al que le ha llegado una cosa y si se le ha pasado el plazo para emitir el informe». Dejando claro que la polémica está cerrada, la alcaldesa habla sobre lo vivido en la plaza: «Lo que les dije allí es que fue un poco indigno, porque me parecía que si estábamos demandando una sanidad digna lo que no me parecía lógico es que me echasen a los leones cuando yo estaba como una más y en representación de todos.  Y salí a dar la cara, por eso me pareció un poco injusto».