El Ayuntamiento, a través de la Policía Local Administrativa, realizó 63 denuncias a propietarios de perros peligrosos por llevarlos sueltos y sin bozal en 2017.La infracción está calificada como grave, de modo que es sancionada con multas de entre 300,52 y 2.404,06 euros, según la Ley 50/1999, de 23 de diciembre, sobre el Régimen Jurídico de la Tenencia de Animales Potencialmente Peligrosos.También se incluye en este apartado incumplir la identificación del animal u omitir la inscripción en el registro. Las infracciones muy graves, sancionadas con entre 2.404,06 y 15,205,30 euros, son abandonar al animal, no tener licencia o venderle a quien carezca de licencia, entre otras.En la última década hay censados en Burgos 324 perros peligrosos. Amstaff y Pit bull terrier son los más comunes.