Cualquier restauración de edificios en el centro histórico es bienvenida al contribuir no solo a mejorar la estética de esta zona de la ciudad sino la calidad de vida de los residentes pero también entraña algunas dificultades por la necesidad de colocar grandes andamios que obstaculizan el paso. En el caso de la calle San Juan coinciden hasta 3 rehabilitaciones cuyos andamios invaden las aceras.