Miembros de entidades fundadoras de este colectivo han reivindicado el impulso de iniciativas políticas internacionales para que las personas migrantes no se vean obligadas a tomar las rutas más peligrosas, para que haya un mejor sistema de acogida, nuevas vías legales y seguras, así como el fin de las devoluciones. Y, por supuesto, exigen respeto a los derechos humanos