El grupo de al menos 17 opositores que presentaron un recurso de reposición contra la composición de uno de los tribunales de la especialidad de Sistemas y Aplicaciones Informáticas, cuyo examen se celebró en Burgos, está decidido a continuar con el proceso y llevarlo a la Justicia con el fin de que se anule el concurso público. La respuesta de la Consejería de Educación a sus reclamaciones aún no ha llegado, a pesar de que el plazo de contestación finalizó el pasado 28 de junio, si bien fuentes de este departamento aseguran que se está «trabajando en ello» y que las notificaciones se enviarán la semana que viene.
Los aspirantes anuncian su intención de presentar a principios de septiembre un recurso contencioso-administrativo, según confirma uno de ellos, Pablo Pérez, para lo cual cuentan con «seis meses de plazo». En él asegura que solicitarán la anulación de todo el procedimiento, tal y como lo hicieron en el que enviaron a la Dirección General de Recursos Humanos, además de la asunción de «responsabilidades y daños y perjuicios».

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