Alejandro Martínez Villadas sonríe hasta por los ojos. Hoy hace justo 2 semanas que tiene trabajo, un logro no pequeño en esta época terrible de abultadísimas cifras de paro, especialmente entre las personas con alguna discapacidad. Porque este joven de 28 años tiene Síndrome de Down, lo que no le ha impedido formarse e integrarse socialmente a través de la Asociación Síndrome de Down Burgos.