Aún no hay calendario fijado ni planes cerrados, pero los trabajos para el desmantelamiento de la central nuclear de Garoña, en el Valle de Tobalina, se prolongarán durante casi dos décadas... La 'muerte' de una central, avisan los vecinos de Zorita, es lenta y dolorosa para un entorno anestesiado con el maná de prosperidad que reparte durante décadas esta poderosa industria.