Al inicio de febrero, la Guardia Civil conoció la existencia de un posible laboratorio de marihuana, donde se podría estar cultivando droga en una vivienda de Villamiel de Muñó. Tras numerosas vigilancias se descubrió que era regentado por 2 varones, y ante la sospecha de una próxima recolección, se practicó un registro que permitió detener a uno de ellos. El otro fue localizado en otro registro.