La víctima solicitó la presencia de la Policía Nacional en el domicilio en el que convive con su hijo después de que este le sustrajera dinero y joyas para venderlas y quedarse con el importe. Cuando la madre le reprochó la actitud, el hijo amenazó con agredirla y la insultó, huyendo después. Posteriormente volvió y fue detenido por los agentes como autor de un presunto delito de malos tratos.