La estructura del informe se basa en plantear 3 posibles escenarios. El primero consistiría en hacer la inversión mínima (14 millones) para reactivar el tráfico. El segundo, incrementar la inversión básica hasta los 95 millones para incorporar sistemas de bloqueo y otras mejoras. Y el tercero, dedicar casi 150 millones para hacer todo lo anterior y, además electrificar la línea.