El cambio, según explican desde la Fundación Caja de Burgos, se enmarca dentro del Plan Estratégico de la entidad, realizado con visión de género y "dentro del convencimiento de que los colegios se tienen que adaptar a la realidad" y de que su responsabilidad es la de "preparar ciudadanos nuevos para situaciones nuevas", explica el responsable de Cultura e Innovación Educativa de la Fundación.