Las estadísticas vuelven a reproducir un panorama juvenil desolador en España, aunque con cierta tendencia a la mejoría. Así, uno de cada cinco jóvenes (19,4 por ciento) de entre 15 y 29 años ni estudia ni trabaja, según los datos del Gobierno relativos a 2015, que revelan, no obstante, que este porcentaje se ha reducido en 1,3 puntos respecto al año anterior, ya que esta circunstancia afectaba al 20,7 por ciento en 2014. 

Se trata de la última estadística del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, publicada ayer y basada en la Encuesta de Población Activa (EPA), correspondiente al tercer trimestre de 2015 y que, entre otros aspectos, analiza la transición de la formación al trabajo. Sin embargo, esa cifra de ninis asciende hasta el 20,9 por ciento cuando se refiere al grupo de edad de 15 a 35 años. 

Estos porcentajes se refieren, según explica Educación, a personas que durante la semana de referencia no han tenido un trabajo por cuenta ajena o ejercido una actividad por cuenta propia y que no han seguido ningún tipo de estudio o formación en las cuatro semanas anteriores a la realización de la entrevista. 

Según refleja la estadística desde el comienzo del siglo XXI, concretamente desde que arranca el recuento en 2002, el dato de jóvenes que ni estudia ni trabaja baja en los primeros años del ciclo -15,2 por ciento en 2002; 14,8 por ciento en 2003; 14,4 por ciento en 2004; 14 por ciento en 2005; 12,9 por ciento en 2006; y 12,8 por ciento en 2007-, sin embargo en 2008, cuando comienza la crisis, sube 2,5 puntos respecto al ejercicio anterior, hasta llegar al 15,3 por ciento. 

En consecuencia, 2007 es el año con el dato más bajo de jóvenes que ni estudian ni trabajan y desde 2008 este porcentaje no deja de crecer y alcanza su máximo en 2013 (22,5 por ciento). Desciende de nuevo (-1,8) en 2014 (20,7). 

Por sexo, los chicos que son ninis se sitúan por debajo de la media nacional (19,2 por ciento), mientras que las chicas están por encima (19,7 por ciento). Además, el estudio revela que la diferencia es de casi el doble entre quienes han completado la educación obligatoria o superior y los que no han terminado tercero o cuarto de la ESO. Mientras estos últimos presentan un porcentaje del 28,9 por ciento, los que tienen la segunda etapa de la enseñanza obligatoria se reducen al 14,6 por ciento. 

La media europea de los Veintiocho cuenta con un porcentaje de ninis del 14,8 por ciento en 2015, es decir, 4,6 puntos menos que España (19,4 por ciento). Solo Croacia (20,1 por ciento), Rumanía (20,9 por ciento), Bulgaria (22,2 por ciento), Grecia (24,1 por ciento) e Italia (25,7 por ciento) son los que presentan datos más altos que España. 

Mientras, países como Suecia (7,4 por ciento), Luxemburgo (7,6 por ciento), Dinamarca (7,7), Alemania (8,5) y Austria (8,7 por ciento), se encuentran entre los Estados europeos con menos jóvenes entre 15 y 29 años que ni estudian ni trabajan. 

 

tasa de colocación. Por su parte, el Ministerio de Educación también ofrece datos sobre la tasa de empleo de la población de entre 20 y 34 años graduada en los tres últimos años según el nivel formativo. Así, entre quienes cuentan con educación superior -FP de grado superior o carrera universitaria- la tasa durante el ejercicio 2015 es del 68,7 por ciento. 

El índice medio de empleo de la UE-28 para este grupo de edad con estudios superiores es del 81,9 por ciento, 13,2 puntos más que la española. Solo Grecia e Italia tienen cifras peores que España: 49,9 y 57,5 por ciento, respectivamente. 

De nuevo, Alemania, con un porcentaje de empleo del 93,3 por ciento, Suecia y Países Bajos (ambos del 90,9) y Austria (90,3) son los Estados con mejores datos.