Los de Salinas tuvieron más posesión de pelota que un filial que esperó a los blanquinegros en su campo a la caza de alguna contra y lo hizo en el 49 de partido en una acción culminada por Guruzeta. El Burgos tuvo que estirar líneas y finalmente encontró el empate en la acción más inesperada. Un despeje de Saizar que tocó Óscar Gil y que pilló descolocado a Unai Simón para colarse en la red