Unos horarios más europeos, con un final de jornada más temprano que permita conciliar vida laboral y personal, ha flotado siempre en el ambiente de todas las negociaciones colectivas. En esa línea va la propuesta lanzada por Fátima Báñez, quien situó como posible hora de fin de la jornada laboral las 18.00 h. Los agentes implicados coinciden en que sería positivo, pero dudan de que sea realizable