Tras llegar información procedente de Zamora, se investigó a un vendedor, participante en el mercado, que pudiera haber incurrido en un supuesto fraude, falta de trazabilidad y uso fraudulento de precinta de alcoholes en los productos. Finalmente, se comprobaron irregularidades en la etiqueta de registro sanitario en el caso de la miel y carencia del timbrado de impuestos de alcohol en los orujos.