Al Ayuntamiento de Burgos le desborda la fiebre por organizar eventos deportivos. su proliferación a lo largo de los últimos años exige un esfuerzo a la administración con gran coste tanto en tiempo de trabajo como en dinero y del que los ciudadanos no suelen darse cuenta, sean o no participantes. Desde este año Deportes obliga a notificar todas las pruebas, incluso si no afectan al tráfico.