La vigésimo primera edición del Congreso Nacional Farmacéutico ha sido la excusa para organizar en la capital una exposición en la que se repasa la historia de la farmacia: desde la Prehistoria, cuando hay constancia de que ya se utilizaban plantas y productos de la naturaleza como remedio curativo o analgésico hasta nuestros días, en los que el objetivo del farmacéutico sigue siendo el de proveer un remedio al enfermo, ahora en forma de medicamento. Este es el hilo argumental de 'Hortus Sanitatis. Boticas monásticas y hospitalarias en los caminos de peregrinación', una muestra inaugurada esta tarde en el MEH que, a partir de 90 objetos de lo más variado, relata cuál ha sido la evolución de la profesión farmacéutica. El comisario, Juan Ruiz Carcedo, ha destacado que se ha dado especial relevancia a la botica del antiguo monasterio de San Juan o a la de Santo Domingo de Silos, pero sin dejar de lado otros elementos de interés procedentes de ámbitos distintos, como el Ayuntamiento de Burgos, el Colegio de Farmacéuticos o colecciones particulares.

A la inauguración ha asistido la directora general de Políticas Culturales de la Junta, Mar Sancho; los presidentes de los Colegios de Farmacéuticos de España y Burgos, Jesús Aguilar y Miguel López de Abechuco; o el vicepresidente de la Fundación VIII Centenario, Antonio Miguel Méndez Pozo, quien ha recordado que el programa que recuerda los 800 años de la colocación de la primera piedra de la Catedral está muy unido al Camino de Santiago y, por lo tanto, al papel que jugaron los monasterios del trazado en el cuidado de la salud de los peregrinos. Todos ellos han sido recibidos por el director científico del MEH, Juan Luis Arsuaga.

La muestra es gratuita y podrá verse hasta el 15 de enero de 2019 en el sótano del museo.