Ana Julia Quezada, de 44 años, llegó en 1995 a Burgos procedente de su país natal, la República Dominicana, y se instaló junto a sus dos hijas de dos y cuatro años -que tuvo en su país fruto de una relación anterior- en un piso de esta ciudad.Un año después, la niña de 4 años falleció en lo que fue considerada una muerte accidental, según han informado fuentes de la investigación, quienes han añadido que fue la pareja en ese momento de Ana Julia -que no era el padre de la niña- quien encontró su cuerpo.La otra hija continúa residiendo en Burgos.Tras conocerse su supuesta implicación en la desaparición y posterior muerte de Gabriel, la Policía Nacional investiga los años que Ana Julia Quezada residió en Burgos y donde trabajó durante un tiempo en una carnicería.