Por fin todo empieza a ser normal
martes, 26 de mayo de 2020
Aunque han abierto una minoría, y solo las terrazas, lo cierto es que ver cafeterías y bares abiertos invita a la esperanza. Las calle vuelven a bullir, lo que representa un inyección de optimismo en el decaído ánimo de los burgaleses que observan cómo el confinamiento se alargaba más de la cuenta.